DOLMEN
Ferruccio LavianiLámpara de pie para instalar apoyada en la pared de luz difusa y reflejada. La lámpara está formada por una placa de aluminio cortada con láser, doblada con prensa de flexión y acabada a mano. El aluminio está anodizado y sucesivamente se barniza con líquido transparente o de color. Dispone de dos difusores en PMMA opalino. El frontal es ligeramente gofrado. Entre los dos difusores se ha colocado una placa, en PMMA transparente, que propaga la luz procedente de los LED multichip instalados en los lados largos de la estructura en aluminio. La placa está grabada con láser en las áreas que coinciden con los ojos de buey para concentrar el reflejo de la luz. Dispone de cable eléctrico y regulador de luz transparente para el anclaje obligatorio a la pared. Se entrega de serie un pequeño soporte .
Uno de los proyectos más icónicos de la historia Foscarini, revisitado en función de las nuevas oportunidades ofrecidas por la tecnología LED. Se trata de Dolmen, la lámpara diseñada por Ferruccio Laviani a mediados de la década de los 90. Una pieza de valor simbólico fuerte, expresión de un concepto de lámpara-escultura que no pasa nunca desapercibida gracias a la excepcionalidad de su forma monolítica, con cuatro grandes orificios similares a los portillos de un barco, y a su insólita colocación apoyada en la pared, además de su colocación en suspensión. La utilización de una fuente luminosa de LED con regulador de luz, con una luz cálida y uniforme, ha permitido adaptar el diseño de la lámpara, que se vuelve más fino y con una limpieza estética mayor. Los acabados propuestos transforman su personalidad, sugiriendo emociones y ambientaciones distintas: anaranjado mate de sabor industrial o aluminio cepillado mate de inspiracion hi-tech, o bien un cálido color bronce. En todas las versiones, Dolmen regala al ambiente en el que se coloca su carácter atrevido y su personalidad inmediatamente reconocible.