Las alfombras de diseño son una vía excelente de personalizar la estancia. Pueden ser atrevidas y coloridas, tranquilas y acogedoras, naturales o hechas a mano e incluso aptas para exteriores. Cierto es que con tantas opciones disponibles, puede ser complicado decidir qué alfombra es mejor para tu hogar. El tipo de alfombra que elijas dependerá de una serie de factores, desde el criterio estético hasta la practicidad, así que aquí van nuestros consejos:
Lo primero que debes tener en cuenta al comprar una alfombra es la gente que vive en casa y el espacio. Las alfombras son excepcionalmente versátiles y pueden satisfacer distintas necesidades. Antes de comenzar a buscar una alfombra, es importante tener en cuenta cuál será el propósito principal de la alfombra. En muchos casos, simplemente tendrá fines estéticos, pero en otros, podría tener una necesidad adicional y más práctica.
Los principales usos que se da a una alfombra en los hogares modernos de hoy en día son;
Sentido práctico; Los suelos de parquet natural pueden ser muy bonitos, pero en ocasiones generan algunos problemas, como pasos ruidosos y pérdida de calor.
También pueden ser peligrosos si tienes niños gateando. Una alfombra con estilo lujoso y acogedor ayudará a solventar estos problemas.
Las alfombras también pueden proteger áreas por donde hay mucho paso. Zonas como los pasillos se usan con tanta frecuencia que a menudo las alfombras se desgastan rápidamente, los azulejos se pueden rayar y las maderas se estropean. Invertir en una alfombra asegurará que el suelo debajo esté protegido de todas las marcas, rasguños y desgaste general. Las alfombras de papel y los sintéticas son una opción particularmente buena para estas zonas, ya que tienen son resistentes y se pueden mover y limpiar fácilmente con un paño húmedo.
Definición de espacios; Para diferenciar as distintas zonas de las viviendas de planta abierta, las alfombras son realmente útiles. Ayuda a distinguir áreas sin el uso de paredes y además pueden ayudar a añadir colores y texturas a un espacio grande.
Recoger el espacio de estar con una alfombra acogedora de grandes dimensiones que envuelva el sofá, la mesa de centro o el mueble de TV, o separar la zona de comedor con una alfombra bajo la mesa, es esencial cuando se trata de grandes espacios abiertos.
A menudo la ubicación de la alfombra puede traer más puntos a considerar. Si tu nueva alfombra es para la cocina, la resistencia a las manchas puede ser importante; si está en una habitación soleada, es mejor que tenga algún tratamiento que la proteja contra la luz solar directa.
Estilo y color – Ahora viene la locura, hay muchísimos diseños y texturas en las alfombras contemporáneas. Hay algunas con colores vibrantes y patrones abstractos que son ideales para salas de estar modernas o habitaciones infantiles. O si eres más tradicional, también existen gran variedad de tonos neutros con distintas calidades que son perfectas para agregar un toque sutil y acogedor a una habitación, sala, comedor o pasillo.
La calidad de una alfombra se mide ante todo por el material en la que está fabricada. La lana es una de las opciones más populares si se opta por un material natural. Las alfombras de lana ofrecen numerosas ventajas. No solo es una fibra que ofrece comodidad y calidez, también es resistente al fuego, repelente de la suciedad y un aislante acústico. Existen numerosos tipos de lana disponibles, incluida la lana pura y la lana de Nueva Zelanda. La lana pura se refiere al cabello que se ha obtenido de una oveja o cordero que nunca se ha hilado. Representa solo el 5% de la producción mundial de fibra en todo el mundo y es un producto de lujo. La lana de Nueva Zelanda se cultiva en pastizales abiertos siguiendo el uso sostenible de la tierra y las buenas prácticas con los animales, además de ser 100% naturales, renovables y biodegradables. Como alternativa a la lana, el papel tejido es una excelente opción para hogares modernos, especialmente en áreas de alto tráfico como pasillos. Las fibras bien tejidas aseguran que sea duradera y resistente, y el recubrimiento aplicado le permite limpiarla cuando es necesario.
Si tienes una alfombra de lana, pasar la aspiradora de forma regular ayudará a regular el proceso de desprendimiento natural y la mantendrá sin el exceso de fibras. Si es de viscosa, pasar la aspiradora y cepillarla es la mejor forma de llevar a cabo el mantenimiento. Si la alfombra es reversible, darle la vuelta garantizará un desgaste uniforme, y la mantendrá libre de polillas. Por otra parte, es recomendable colocar una almohadilla antideslizante debajo de tu alfombra. Esto mantendrá la alfombra en su lugar (lo que significa que no se resbalará ni tropezará) y evitará que se deslice y se ensucie innecesariamente. Están disponibles en varios tamaños y estilos, pero recomendamos elegir un mate de polietileno de longitud completa que cubra toda la parte inferior de la alfombra. Finalmente, nunca hay que tirar de hilos sueltos. Si ve un hilo suelto en su alfombra, asegúrate de cortarla en la base ya que esto evitará que se desenrede.